Jóvenes con becas de Monitoría de Unibagué cuentan su experiencia
- Comunicación Institucional
Lina Cardona Mendoza y Sebastián Torres son dos de los cientos de jóvenes que, gracias a las becas de Monitoría, costean su estudio trabajando en distintas dependencias de nuestra alma máter, una experiencia que permite a los estudiantes aportar a la economía familiar y adquirir habilidades extras para su vida profesional y personal.
“Sin lugar a dudas, ser monitor en la Universidad de Ibagué es una oportunidad de aprendizaje valiosa. Desde las monitorías se adquiere conciencia de lo importante que resulta administrar bien el tiempo y, así, poder cumplir con las obligaciones como estudiantes y con las responsabilidades que se asumen cuando se es monitor”, comentó Lina Cardona, quien cursa octavo semestre en el programa Derecho y el tercer año como monitora en la biblioteca de nuestra Institución.
“Sin lugar a dudas, ser monitor en la Universidad de Ibagué es una oportunidad de aprendizaje valiosa. Desde las monitorías se adquiere conciencia de lo importante que resulta administrar bien el tiempo y, así, poder cumplir con las obligaciones como estudiantes y con las responsabilidades que se asumen cuando se es monitor”, comentó Lina Cardona, quien cursa octavo semestre en el programa Derecho y el tercer año como monitora en la biblioteca de nuestra Institución.
Paula Alejandra Rivas, coordinadora de Responsabilidad Social Integral de Unibagué, indicó: “Los estudiantes que aplican a las monitorías tienden a ser muy dedicados y esto aumenta sus probabilidades de aprendizaje; se convierten, por lo general, en estudiantes atentos, jóvenes que están alertas a encontrar opciones para poner al servicio de los demás su formación y sus talentos”.
Uno de esos jóvenes es Sebastián Torres, quien de su monitoría en Biblioteca ascendió a Gestión Académica, donde adelanta, junto a un equipo de trabajo, estudios de mercado para proyectar la Universidad y su oferta académica.
Torres, dijo “Ganamos en doble vía. He adquirido habilidades sociales atendiendo a las personas que vienen a solicitar libros y, a la vez, apoyo económicamente a mi familia, reduciendo los costos de mi matrícula con mi trabajo. Mis hermanos se hicieron profesionales de la misma manera. Todos hemos querido estudiar y hemos buscado la forma de hacerlo, y de hacerlo aquí en esta Universidad".
Uno de esos jóvenes es Sebastián Torres, quien de su monitoría en Biblioteca ascendió a Gestión Académica, donde adelanta, junto a un equipo de trabajo, estudios de mercado para proyectar la Universidad y su oferta académica.
Torres, dijo “Ganamos en doble vía. He adquirido habilidades sociales atendiendo a las personas que vienen a solicitar libros y, a la vez, apoyo económicamente a mi familia, reduciendo los costos de mi matrícula con mi trabajo. Mis hermanos se hicieron profesionales de la misma manera. Todos hemos querido estudiar y hemos buscado la forma de hacerlo, y de hacerlo aquí en esta Universidad".
Y añadió: “He desarrollado sentido de pertenencia enorme por la Universidad y creo que ese sentimiento es muy frecuente en los monitores, porque por nuestro ejercicio en ella conocemos la estructura de la Institución y a los funcionarios y, sobre todo, identificamos cómo, día a día, todos trabajamos con cariño para hacer de esta institución la mejor de todas”.
Las becas de monitoría son una estrategia de la Universidad de Ibagué para contribuir al desarrollo regional, dando herramientas de sostenibilidad académica a aquellos estudiantes que, con tenacidad y disciplina, son dueños y artífices de su futuro.
Las becas de monitoría son una estrategia de la Universidad de Ibagué para contribuir al desarrollo regional, dando herramientas de sostenibilidad académica a aquellos estudiantes que, con tenacidad y disciplina, son dueños y artífices de su futuro.