El arte de lo 'bio': así aporta Héctor Hernández al Tolima
- Camilo Yepes
El ingeniero químico Héctor Mauricio Hernández Sarabia es considerado como toda una autoridad cuando de generación de desarrollo en las comunidades, a partir del aprovechamiento y la transformación de residuos, se trata.
Son 29 años de trayectoria en la Institución que respaldan el interés de este ibaguereño, especialista en Automatización Industrial de Unibagué y la Universidad de Gante (Bélgica) y magister en Ingeniería de Control de Unibagué y el Instituto Nacional de la Investigación Argonómica (Inra, por sus siglas en francés), por la investigación en sistemas de economía circular.
Su afinidad con lo 'bio'
Su inicio como docente e investigador en el área de Química de la Facultad de Ciencias Naturales y Matemáticas fue casi en simultáneo con labores en la Fábrica de Licores del Tolima e Industrias Aliadas; luego, con estudios complementarios en Francia y Bélgica y el posterior trabajo en sistemas de tratamiento de aguas residuales.
Su afinidad con lo 'bio'
Su inicio como docente e investigador en el área de Química de la Facultad de Ciencias Naturales y Matemáticas fue casi en simultáneo con labores en la Fábrica de Licores del Tolima e Industrias Aliadas; luego, con estudios complementarios en Francia y Bélgica y el posterior trabajo en sistemas de tratamiento de aguas residuales.
Además de Cafés Especiales, ha participado en proyectos conjuntos con universidades de Chile, Ecuador y España.
De esas experiencias ha tomado lo mejor en cuanto a digestión anaerobia, generación de biogás e instalación de biodigestores, sistemas que ha impulsado desde 2002, cuando se integró al grupo de investigación Gmae (Medio Ambiente y Energía) y del que fue director de 2009 a 2018.
Participar en proyectos como Cafés Especiales, ejecutado con la Universidad del Tolima, el Comité de Cafeteros del Tolima y la Gobernación entre 2018 y 2022, y Pago de Servicios Ambientales, actualmente en desarrollo con el programa Colombia Sostenible en Chaparral, le ha dejado grandes enseñanzas.
Participar en proyectos como Cafés Especiales, ejecutado con la Universidad del Tolima, el Comité de Cafeteros del Tolima y la Gobernación entre 2018 y 2022, y Pago de Servicios Ambientales, actualmente en desarrollo con el programa Colombia Sostenible en Chaparral, le ha dejado grandes enseñanzas.
Hay muchas necesidades. Los biodigestores son apenas una tecnología que se está implementando y hay bastantes restricciones en quienes no lo conocen muy bien y se basan en las técnicas de antaño. Existe información que no es completa, pero cada vez más las personas están conociendo y aplicando mejor".
Por ejemplo, Cafés Especiales lo marcó bastante, debido a la instalación de 30 biodigestores en zonas rurales, lo que deriva para los campesinos en el mayor aprovechamiento de los residuos para sus cultivos. "Eso nos permitió foguearnos en muchos campos", añade.
Entre anhelos y perspectivas
También ha participado en la implementación de estos sistemas en el sector porcícola del norte del departamento, en conjunto con Cortolima; sin embargo, se visiona a un trabajo más intensivo con caficultores y cacaoteros, pues, admite, son los sectores más prominentes en la región.
(¿Recuerdas Cafés especiales?)
También ha participado en la implementación de estos sistemas en el sector porcícola del norte del departamento, en conjunto con Cortolima; sin embargo, se visiona a un trabajo más intensivo con caficultores y cacaoteros, pues, admite, son los sectores más prominentes en la región.
(¿Recuerdas Cafés especiales?)
Seguir mostrando a las comunidades lo económicos y prácticos que son los biodigestores es su labor diaria, fundamentada en un esquema continuo de visitas, valoración de los residuos y la energía, revisión del terreno idóneo y diseño según tamaño y tipo de residuos, para llegar a la instalación.
"Mi dedicación ha sido en estar en contacto con la comunidad para trabajar con ella y empezar a crecer, puesto que hay una brecha muy grande en desarrollo tecnológico entre lo que hay y lo que se requiere", comenta Hernández Sarabia, coordinador del semillero Buefen, con el que se cumplen estas salidas de campo.
"Mi dedicación ha sido en estar en contacto con la comunidad para trabajar con ella y empezar a crecer, puesto que hay una brecha muy grande en desarrollo tecnológico entre lo que hay y lo que se requiere", comenta Hernández Sarabia, coordinador del semillero Buefen, con el que se cumplen estas salidas de campo.
Entre la comunidad se va generando ese conocimiento y es más fácil llegar desde la ciencia; por ejemplo, entre los cafeteros, desde los cafés especiales, se ha visto el interés de crecer y mejorar".
Hernández inició en Unibagué en 1994, como profesor catedrático.
Hernández participa en un proyecto con la Cámara de Comercio de Ibagué por medio de Swisscontact (fundación sin ánimo de lucro), enfocado en la mejora del cacao y la revisión de la huella de carbono generada en su producción. Se han ejecutado pruebas piloto zonificadas en el norte (Armero - Guayabal, Mariquita, Falan y Palocabildo) y el sur (Ortega, Chaparral, Rioblanco y Ataco), como referencia de las zonas más productivas del departamento.